Más de 600 jóvenes vieron el eclipse en el Instituto Sotomayor
Más de 600 jóvenes vieron el eclipse en el Instituto Sotomayor
Por fin llegó el día. Sobre las diez menos cuarto de la mañana del lunes 3, el Sol y la Luna convergieron en el cielo para formar un insólito anillo de fuego. Ha habido que esperar 241 años para poder contemplarlo y no se verá otro en nuestro país hasta el 2026. Los manzanareños han vivido este fenómeno con gran expectación y curiosidad, agotando las gafas especiales que se vendían en las ópticas.
La expectación despertada por el fenómeno ha sido tal, que ya desde el viernes en las ópticas de Manzanares se vendieron infinidad de gafas con filtros especiales. El óptico-optometrista, Sebastián Miñano, dijo que el sábado y el mismo día del eclipse muchos manzanareños, antes de las diez de la mañana, estaban esperando para comprarlas.
Para mirar este fenómeno los manzanareños, además de utilizar las gafas especiales, han mirado al sol con careta de soldador. Todos ellos coincidían en lo curioso, interesante y bonito que les estaba resultando.
En el IES. Sotomayor de Manzanares se ha vivido el fenómeno de una forma muy especial. Desde el Taller de Astronomía, dirigido por el profesor de matemáticas, Ignacio Jiménez, los más de 600 jóvenes, que forman la totalidad del alumnado, han podido participar en una curiosa e interesante actividad.
En primer lugar, han asistido a una parte teórica donde el profesor encargado les ha explicado, con la proyección de imágenes a través de un ordenador, la simulación del eclipse y, sobre todo, han conocido cómo se produce este fenómeno celeste.
A continuación, en la entrada principal del centro educativo, coordinado por el profesor David Abolafia, conocedor de la materia, han visto el eclipse con gafas de filtros especiales y con la proyección indirecta con el telescopio. Esta actividad se ha realizado, previendo que los jóvenes iban a mirar al sol sin asumir los riesgos que conllevaba.
Abolafia destacaba la expectación creada en el instituto y la alegría de los chavales por mirar este fenómeno celeste como es el eclipse. "Todos están entusiasmados porque ha sido una actividad que les ha atraído mucho. Es algo muy curioso".
Por su parte, los ópticos y optometristas manzanareños aconsejaron a los centros educativos extremar la precaución y cerrar las cortinas de las aulas para evitar daños oculares. Además, recomendaron dejar sin recreo a los niños más pequeños para evitar que miraran al Sol sin la debida protección durante más de un minuto. "Eso si, los mas mayores han salido al patio compartiendo las gafas especiales", dijo el óptico Sebastián Miñano.
Se han cumplido las previsiones meteorológicas que auguraban un escenario atmosférico idóneo para el acontecimiento, con un cielo azul y despejado en Manzanares lo que ha hecho que sus habitantes hayan podido disfrutar con él.