Los trabajadores de Exide van a la huelga

Tras cuatro reuniones de convenio y una en el Servicio Inter Confederal de Mediación de Arbitraje (SIMA), los 1.498 trabajadores de Exide España van a la huelga. Entre estos trabajadores se encuentran los 400 empleados de la fábrica de Tudor en Manzanares. Agustín Ortega, Portavoz de UGT aseguró que convocaron la jornada de huelga del 16 de julio para presionar a la empresa, que se ha mostrado intransigente en la negociación de este convenio. Además, se ha propuesto un calendario de movilizaciones para el mes de septiembre.

Las reivindicaciones de los trabajadores de Tudor-Exide España pasan por dos puntos fundamentales, que son un aumento salarial, que equipare los sueldos a la subida del IPC y la desaparición de la doble escala salarial.

Con respecto a la primera reivindicación, Ortega destacó que la exigencia con respecto al IPC no debe tener ningún tipo de condicionante por parte de la empresa. Pero Exide ha condicionado este punto a la productividad y a un control de horarios entre compañeros, que los trabajadores denominan “la palmada”, ya pactada en el anterior convenio y que, según Ortega, obliga a los trabajadores a adoptar un papel policial que no les corresponde.

Con respecto a la abolición de la doble escala salarial, el portavoz de UGT explicó que existen tres categorías dentro de Tudor, en las cuales se realiza un trabajo similar, pero se registran grandes diferencias salariales, que no dejan de crecer año tras año. La empresa les ha ofrecido la creación de una única categoría, llamada Peón Especialista Exide, pero los huelguistas consideran que esta medida beneficiaría a pocos trabajadores y esto sería a costa de recortes salariales para el resto de la plantilla.

Antonio García León , portavoz de CCOO, matizó que la empresa, en los últimos tiempos, no solo ha conseguido acabar con su déficit, sino que ha registrado unos resultados fiscales muy positivos. Pero este hecho, no se ha reflejado en mejoras para los trabajadores. Por el contrario, los costes laborales, que son el precio por unidad de producción que la empresa paga a los trabajadores, es cada vez menor.

Así las cosas, parece que por el momento el III Convenio Colectivo de Tudor-Exide ha pasado de la mesa de negociaciones a las movilizaciones a pie de calle. Habrá que esperar a la respuesta de la empresa para saber el alcance real de esta huelga.