“Hausa” presenta la campaña “Vacaciones en paz 2010”

“Hausa” presenta la campaña “Vacaciones en paz 2010”

El delegado de la Asociación “Hausa” en Manzanares, Juan Manuel del Rey, presentó la campaña “Vacaciones en paz 2010”, que tiene por objetivo la acogida de niños y niñas saharauis durante el periodo estival. Las familias interesadas podrán informarse en los teléfonos 625-106-712, 609-789-519 ó 617-164-315.

Sociedad
07-06-2010
Hausa, acogida de niños

“Vacaciones en paz” es un programa anual, que promueve en Manzanares y en su comarca la Asociación “Hausa”, y que permite a niños saharauis pasar los meses de verano en España alejados de las duras condiciones de vida de los campamentos de refugiados en el desierto argelino.

El Delegado local de la asociación, Juan Manuel del Rey, manifestó que, además de un rico intercambio entre culturas, “Vacaciones en paz” supone un bonito gesto de generosidad por parte de las familias manzanareñas, de Castilla-La Mancha y de todo el país que acogen a estos chavales, y animó a la ciudadanía “a hacer un ejercicio de reflexión” para que compartan sus vacaciones con los niños y niñas saharauis.

Del Rey recordó la dramática situación por la que está pasando el pueblo saharaui, indicó que la respuesta ciudadana es fundamental y mucho más, dijo, “en este tipo de actos que salen del corazón y que son totalmente generosos y voluntarios”.

El 27 de febrero de 1976 fue proclamada la República Árabe Saharaui Democrática, un estado reconocido por casi ochenta miembros de Naciones Unidas y que, sin embargo, nunca ha podido ejercer la soberanía sobre su territorio por la ocupación militar de Marruecos. Juan Manuel del Rey, delegado local de la Asociación “Hausa” declaró al respecto que cuantos más niños vengan, más familias podrán conocer el problema saharaui.

Con este programa, continuó Del Rey, se pretende sacar al mayor número de niños posible del ambiente en el que viven en pleno desierto argelino con temperaturas que ya superan los 40º; ofrecerles la posibilidad de pasar dos meses en un entorno de paz; y poder detectarles aquí en España, a través del reconocimiento médico que se les hace al llegar a nuestro país, posibles enfermedades que no han sido detectadas en sus campamentos de refugiados.

Según Del Rey, a las familias no se les exigen unos requisitos especiales para poder ser acogedoras, sin embargo sí tienen que cumplir con el compromiso de atender las necesidades de los niños y tratarlos como a un miembro más de la familia. Añadió que la experiencia resulta “inolvidable” y prueba de ello son las familias que desde sus inicios están acogiendo a niños en Manzanares.