Experiencias en incubación empresarial como modelos del nuevo vivero de Manzanares

Aspectos como la preincubación de empresas a partir de una idea o el co-working fueron tratados en esta mesa redonda en la que participaron Mayte Carmona, que explicó el trabajo en los viveros de Ciudad Real y Puertollano; Fernanda Conde, que hizo lo propio con la red de viveros INCYDE de Toledo, Talavera e Illescas; y Daniel del Toro y Alberto Pérez, representantes del vivero de Sevilla.

Los técnicos andaluces se centraron en la idea de trabajo en el espacio común, el co-working, en el que además de unos servicios “hay que crear una comunidad en sí”. Mientras las incubadoras o viveros de empresas dan un servicio, los espacios colaborativos permiten la conexión con otras personas entre las que surge la serendipia, el descubrimiento de ideas de negocio. A lo largo de la exposición de los ponentes se habló además de las posibilidades de búsqueda de financiación de proyectos por parte del propio vivero, o de colaboración con la Universidad.

En la mesa participó el coordinador del Centro de Empresas de Manzanares, Juan Vicente García Parada, que anunció que en unos seis meses estará listo el nuevo vivero que construirá el Ayuntamiento gracias a la financiación, en un 80%, de la Fundación INCYDE de las Cámaras de Comercio, lo que permitirá formar parte de su importante red de incubadoras empresariales.

García dijo que un segundo vivero en una ciudad de 20.000 habitantes es un reto que se planteó por el decidido, firme y sostenido apoyo a los emprendedores por parte del equipo de gobierno. El actual centro de empresas, el primero de carácter municipal que se puso en marcha en Castilla-La Mancha hace 17 años, está ocupado al 100% y cuenta con lista de espera.

Pero más que para alojar a emprendedores como “hotel de empresas”, la concejalía de Promoción Económica quiere ir más allá con el nuevo vivero que se construirá en terrenos próximos al actual. “El concurso Emprende nos ha permitido conocer cuarenta proyectos de emprendedores de los que cerca de la mitad son viables pero no han podido tener continuidad”, explicó García. Por ello el nuevo vivero pretende dársela, al igual que a los proyectos que han surgido en otros programas formativos para emprendedores que se han desarrollado en la localidad. “Todo ello garantiza la viabilidad y éxito del nuevo vivero”, concluyó García Parada.