Casa del Blanco recibe el reconocimiento de la denominación de Pago

Tras varios años de esfuerzo y trabajo por demostrar la personalidad propia de sus caldos, la bodega manzanareña Pago Casa del Blanco ha conseguido el reconocimiento a su singularidad que le ha concedido la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente en forma de Pago vitivinícola. Se separa, por tanto, de la indicación geográfica protegida de Vinos de la Tierra de Castilla, a la que hasta ahora estaba adscrito, para pasar a conformar su propia Denominación de Pago.

Antonio Merino, enólogo de la bodega, afirma que esta concesión se ha sido recibida con mucha ilusión. Aclara que, desde su fundación, tenían claro que necesitaban dar un valor añadido a sus vinos y siempre pensaron en la obtención de la Denominación de Origen Pago, ya que consideraban que cumplían esas con todas las premisas. Además, considera que va a suponer un valor añadido importante para la marca, tanto a nivel de producto como de ventas.

Con objeto de lograr este reconocimiento, Pago Casa del Blanco ha tenido que llevar a cabo una serie de protocolos, con los que se pretendía demostrar que sus vinos son singulares y diferentes al resto de los de su entorno. Para ello, además de hacerlos catar por especialistas, que certificaron unas sensaciones organolépticas al paladar particulares, se han realizado distintas catas en el terreno y se han recogido muestras de vinos de cinco añadas distintas, para ser analizadas en profundidad.

El resultado de este trabajo ha sido el descubrimiento de tres peculiaridades en los caldos de Pago Casa del Blanco. Uno de ellos está relacionado con la coloración del vino, que no responde a su envejecimiento real, sino que es más intenso, haciendo que parezca de añadas posteriores, con lo cual tiene un potencial de envejecimiento a largo plazo. Por otra parte, la actividad antioxidante de los vinos Quixote, que elabora Pago Casa del Blanco, es el doble que la de los vinos del entorno. Pero quizá la diferencia más significativa sea el contenido de iones litio, que es hasta diez veces superior al de los caldos de la zona. Este principio activo se utiliza en farmacología para combatir la depresión.

Esta última, la singularidad de los terrenos donde se produce la uva, que contienen una elevada concentración de litio que se transmite al vino en cantidades elevadas, han sido el factor principal que a Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha tendido en cuenta como un elemento diferenciador, que le confiere la personalidad necesaria para ser un vino de Pago.

En cuanto a los nuevos proyectos de la bodega se encuentra la construcción de una segunda nave, gemela a la actual, cuyas obras están próximas a finalizar. Esta ampliación también servirá para incrementar la oferta de ocio de Pago Casa del Blanco. De esta forma, se permitirá la cata y degustación de los caldos que se elaboran en la bodega, Quixote y Pilas Bonas, así como la visita a las instalaciones, adaptándose al más puro estilo de los “châteaux” franceses.

A nivel vitivinícola, saldrá al mercado una nueva referencia, un coupage de variedad Malbec con Cabernet Franc, con el que, según explicó Antonio Merino, esperan satisfacer los paladares más exigentes, ya que se trata de un producto muy original.

El pago vitícola Casa del Blanco está situada en el término municipal de Manzanares y cuenta con una superficie de viñedo de 92,7 hectáreas. Las variedades de vid que producen son Tempranillo o Cencibel, Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah, Petit Verdot, Malbec y Cabernet Franc en cuanto a tintas y, en blancas, Sauvignon Blanc y Chardonnay.