Los escolares aprenden a comer bien y a estar seguros en casa

Los días 3, 4, 5, 10, 11 y 12 de diciembre, los alumnos y alumnas de diferentes colegios participaron en unas actividades ludico-educativas organizadas por el Área de Consumo del Ayuntamiento de Manzanares, a través de la Oficina Municipal de Información al Consumidor. Conchi Almodóvar, técnica del Centro de Formación del Consumidor Móvil de Castilla-La Mancha impartió dos talleres: uno dirigido a los más pequeños, de 1 y 2º de Educación Primaria referente a la seguridad en el hogar, y el otro dedicado a la nutrición y alimentación al que asistieron grupos de 3º a 6 de Primaria.

En todo momento, Almodóvar intentó captar la atención de los asistentes gracias a sus explicaciones sencillas. Para ello les hizo a los alumnos y alumnas manzanareños partícipes de los talleres y les enseñó cómo deben alimentarse correctamente y cómo tener cuidado con algunos objetos que se encuentran en el hogar.

El taller de alimentación y nutrición se basó en la pirámide de la dieta mediterránea y con ello intentó que los asistentes volvieran a los buenos hábitos alimenticios y dejaran a un lado de consumir bollería industrial, embutidos y bebidas gaseosas, sustituyéndolas por una comida tradicional. También incentivó a los pequeños en el consumo de frutas y verduras.

Otro de los talleres impartidos en Manzanares por la técnico del CFC Móvil fue el de “seguridad en el hogar”. Con él los pequeños conocieron los riesgos que encierran sus propias casas mediante un juego interactivo. Según Conchi Almodóvar los escolares manzanareños sintieron gran curiosidad en los dos talleres y participaron activamente en ellos a través de las preguntas.

El Área de Consumo del Ayuntamiento de Manzanares, a través de la Oficina Centro de Formación del Consumidor Móvil, dependiente del Instituto de Consumo de Castilla la Mancha pretende acercar los recursos disponibles para ofrecer a los ciudadanos, y en concreto a los escolares, la información y la formación como herramienta de educación.

El CFC dispone de cuatro áreas muy diferenciadas y que abarcan desde la alimentación, la seguridad en el hogar, hasta el medio ambiente (reciclaje) y el área de comercio justo.