Un buen calzado e hidratación, factores para mantener el pie sano

En verano, es frecuente oír que hay que tener más cuidado con las infecciones en el pie, pero en realidad, según el podólogo manzanareño Ricardo Acevedo, el cuidado debe ser el mismo que cuando hace frío. Añade que sin contar las infecciones provocadas por heridas al llevar expuesto el pie, el resto de patologías infecciosas son más o menos igual de frecuentes que en invierno.

Acevedo apuntó que para mantener el pie lo suficientemente sano es imprescindible, además de utilizar un calzado adecuado, el uso frecuente y regular de cremas hidratantes normales, y, si es necesario, cremas que contengan urea o ácido láctico ( o las dos). Añade que es fundamental hidratarse interiormente con la ingesta de líquido suficiente.

El podólogo señaló que el cuidado de los pies no se debe pasar por alto, pues sufren un grandísimo desgaste diario además de estar casi siempre tapados. Esa falta de ventilación obliga, sobre todo en verano, a prestar más atención a los cuidados de los pies. Añadió que son los grandes olvidados de las rutinas de belleza.

Entre las patologías más típicas en esta época del año están las durezas, grietas y los hongos. El experto informó que el calor y la humedad dan lugar a que crezcan y se desarrollen los hongos. Una buena forma de prevenirlo es utilizando el calzado adecuado.

Uno de los síntomas más importantes que avisa de un posible caso de hongos es cuando se vemos que las uñas varían de textura y/o de color. En algunos casos también se observa un olor muy fuerte y picor. Aunque los hongos suelen salir en las uñas también pueden salir entre los dedos y otras partes del pié. Concluyó que un detalle muy importante es secar perfectamente los pies después del baño.