El Ballet flamenco de Sara Baras entusiasmó al público que asistió al espectáculo “Sabores”

El Ballet flamenco de Sara Baras entusiasmó al público que asistió al espectáculo “Sabores”

“Sabores” consiguió el primer lleno absoluto de la temporada cultural del Gran Teatro en la noche del sábado. El público, que quedó entusiasmado con el arte y el ritmo de los músicos y bailaores del Ballet flamenco de Sara Baras, perdonó la escasa presencia de la artista gaditana en la primera parte del espectáculo y se dejó llevar por su carisma.

Cultura. Espectáculos
06-11-2007

El Ballet flamenco de Sara Baras, con el que dio comienzo la programación cultural del mes de noviembre en Manzanares, conquistó al público que llenó por completo el Gran Teatro el sábado, con un espectáculo en la que la bailaora gaditana rescata el más puro baile flamenco. “Sabores”, que cierra la trilogía iniciada hace ocho años y compuesta por los espectáculos “Sensaciones” y “Sueños”, es una sucesión de cuadros flamencos en los que se mezclan el arte, el sentimiento, los colores y sobre todo el sabor del buen flamenco.

Durante más de una hora y media, el espectáculo lima las fronteras rítmicas y melódicas de los palos y estilos que componen la paleta de sabores del flamenco y que se funden en el colorido del baile. El público, que estuvo totalmente entregado al espectáculo, disfrutó de los tangos, seguiriya, zambra, alegrías, taranto, martinete, tanguillos, jaleos y bulerías.

Aunque Sara Baras tuvo menor presencia sobre el escenario en la primera parte del espectáculo, el público supo esperar con paciencia sus esporádicas actuaciones mientras aplaudía con entusiasmo el alto nivel artístico que demostraron el cuerpo de baile y los bailaores invitados, José Serrano y Luis Ortega, que no sólo acompañan en el baile conjunto, sino que cada uno brilla por separado en extraordinarios solos.

La música, compuesta especialmente para el espectáculo, está interpretada en directo por seis músicos (dos guitarras, dos voces, violín y percusión), dirigidos por José María Bandera. Asimismo, el vestuario representa un ballet flamenco de hoy destacando, sobre todo, la sencillez formal de los vestidos de los bailaores y el colorido, que varía según el significado de cada palo flamenco.

El último tramo de “Sabores” estuvo protagonizado, no solo por el arte de Sara Baras, sino también por su entrega y simpatía, conectando con el público y dejando constancia de su agradecimiento por la estupenda acogida del público manzanareño en su tercera actuación en la localidad. También invitó a una joven del público a bailar unos minutos y, ante la ovación cerrada del respetable, se despidió con un “viva Manzanares” que emocionó a los espectadores.