230 kilos de sardinas para despedir el Carnaval
230 kilos de sardinas para despedir el Carnaval
El Entierro de la Sardina volvió a recorrer las calles del centro de Manzanares tras varios años realizándose por los Paseos del Río. Fue el colofón al carnaval 2007 y se convirtió en una fiesta popular ya que numeroso público se acercó a despedir el carnaval degustando una sardina asada. Los miembros de la comisión de amigos del carnaval asaron 230 kilos de sardinas durante toda la jornada del miércoles.
Los carnavaleros de siempre no faltaron a la última cita del Carnaval de Manzanares y protagonizaron el tradicional entierro de la sardina, cuyo cortejo fúnebre volvió a captar el interés del público que presenció el desfile por las calles Jesús del Perdón, Virgen de la Paz y Toledo. La comitiva se formó en la plaza de San Antón y tuvo su destino en la estación de autobuses, donde quedó instalado el velatorio de la sardina antes de ser incinerada.
En el cortejo que acompañó a la difunta sardina hubo monaguillos, grandes y chicos, las más altas autoridades religiosas y militares, desconsoladas plañideras y todo tipo de personajes singulares. A pesar de su mejor organización, este año la sardina tuvo menor acompañamiento en el duelo que desfiló detrás del coche fúnebre que condujo el popular “Jaro Malo”. Éste y otros muchos carnavaleros mostraron su pesar por el final de unas fiestas que siguen manteniendo el tipo.
El cierre del carnaval fue muy concurrido en la explanada de la estación de autobuses. Allí se terminaron de asar los más de doscientos kilos de sardinas adquiridos para esta jornada y que comenzaron a repartirse a mediodía en la plaza del Gran Teatro. También hubo un refrigerio que ayudó a tragar alguna raspa.
Mientras que los bailes, a pesar de una notable mejoría, siguen siendo la asignatura pendiente en los últimos años, la concejala de Festejos, Beatriz Torres, hizo una positiva valoración de estas fiestas por la creciente implicación de jóvenes en los concursos. Por encima de todos los actos resaltó el pregón inaugural a cargo de los carnavaleros locales.