“La Casa de Bernarda Alba” consigue el primer gran lleno de la temporada

Justo dos meses antes de ser asesinado, Federico García Lorca terminó de escribir su obra teatral más importante, “La Casa de Bernarda Alba”. Con ella cerró el genial triángulo dramático sobre la mujer rural que inició con “Bodas de Sangre” y “Yerma”. Ahora, setenta años después, las compañías “Teatro de la Danza” y “Entrecajas”, con la dirección de Amelia Ochandiano, homenajean a Lorca y a su última obra con un precioso montaje que capta el interés del público de principio a fin.

Los más de setecientos espectadores que llenaron el Gran Teatro de Manzanares el sábado 21 fueron testigos de una de esas funciones que no se olvidan y que llegan hondo. No por conocido el argumento, la obra dejó de entusiasmar. Lo hizo por su ritmo y por la fuerza de las diez protagonistas, elenco que constituye una de las claves de este montaje.

La veterana Margarita Lozano encabeza el reparto como Bernarda Alba. La rudeza de su voz y su envergadura imprimieron al personaje el poderío que requiere como matriarca represora. El otro puntal de la obra está en Poncia, el papel que encarna María Galiana y que se sitúa entre el odio y el agradecimiento, entre la sinceridad y la ambigüedad. Lorca, que como todos los grandes escribió una historia universal de cualquier época y lugar, construye sobre ambos personajes la teoría del poder y retrata fielmente una situación de opresión en la sociedad rural.

El texto de “La casa de Bernarda Alba”, una de las obras dramáticas más importantes del siglo XX, se respeta al máximo y es siempre el protagonista en el montaje de Ochandiano, que utiliza una sencilla pero cuidada escenografía de Ana Garay. La obra resulta redonda por su construcción dramática, por su lenguaje poético y por su valor reivindicativo y de denuncia plasmado en el papel de Adela, la menor de las hijas de Bernarda Alba, interpretado por una sorprendente Candela Fernández.

Entres las diez primeras actrices que protagonizan la función encontramos a Concha Hidalgo, Aurora Sánchez, Palmira Ferrer, Ruth Gabriel y -otro figurón de la escena española- Nuria Gallardo. Este plantel se completa con Mónica Cano y Saturna Barrio. Todas recibieron una prolongada y calurosa ovación del público que, como ocurre en el resto de plazas, llenó el teatro manzanareño y fue especialmente cariñoso con María Galiana, que ha vuelto a la escena tras un lustro dedicada al cine y a la televisión.

“La Casa de Bernarda Alba” se encuentra de gira con la Red de Teatros de Castilla-La Mancha, en nueve de cuyos auditorios tenemos oportunidad de verla.