Antonio Salinas hablará en FERCAM de la reforma de la OCM del vino

La reforma de esta OCM presenta una importante repercusión en regiones como Castilla La Mancha, en las que el viñedo es el principal cultivo, con relieve no sólo económico, sino medioambiental, social y cultural. El mantenimiento de este cultivo y el de la renta de sus productores deben ser las premisas de dicha reforma, según avanza el experto en temas agrarios del PSOE de Castilla La Mancha.

El retroceso en el consumo de vino, la deslocalización del cultivo, el alto potencial productivo y la función del viñedo en el desarrollo rural son algunos de los factores que influirán en este debate, de interés vital para agricultores, bodegas y cooperativas.

La Comisión Europea ha encargado un estudio a un gabinete técnico en el que están representados varios Estados miembros, en el que se analizarán las sucesivas OCM hasta ahora, como punto de partida para la reforma de 2006. No hay hasta hoy, propuesta para el reglamento que regirá la aplicación de esta reforma. Antonio Salinas señala que Castilla La Mancha debe anticiparse y formular propuestas, para que nuestro sector vitivinícola quede enmarcado en el contexto europeo de la vid y el vino.

En Castilla La Mancha, con 600.000 hectáreas de cultivo en producción (la mitad de España) no existe posibilidad de cultivos alternativos al viñedo.

En el debate de la nueva OCM es preciso reclamar que la vid reciba el pago compensatorio, del mismo modo que el olivar o los cultivos herbáceos. Y por último, habrá que plantear medidas para la recuperación del consumo: "hay que incidir en la recuperación de la demanda y menos en la limitación de la oferta", concluye Salinas.