El director del Plan Regional sobre Drogas participó en el X aniversario de ARMAN

La Asociación de Alcohólicos Rehabilitados de Manzanares (ARMAN) cerró los actos organizados con motivo de su décimo aniversario con un acto de homenaje a los socios más veteranos y en el que se tuvo un reconocimiento hacia el Director General de Planificación y Atención Sociosanitaria de la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha, José Luis López Hernández.

Durante el acto celebrado el sábado 21 se entregaron más de una veintena de diplomas y obsequios a ex alcohólicos y familiares que se incorporaron a ARMAN en sus primeros años de andadura. También hubo un especial agradecimiento a Cáritas, que cedió sus instalaciones en una primera etapa, y a la ex concejala de Servicios Sociales y ex diputada regional, Isabel Quintanilla.

López Hernández, que desempeña la dirección del Plan Regional sobre Drogas casi el mismo tiempo que lleva ARMAN trabajando, recordó los primeros años de la entidad y mostró su satisfacción "por ver cómo muchos socios han ido cambiando para bien a pesar de los años". A continuación dijo que las asociaciones de alcohólicos rehabilitados son un magnífico servicio público. "Cuando se ve a gente que ha recuperado la salud y la felicidad, hay que reconocer que se ha hecho un gran servicio a la sociedad", añadió.

Durante su intervención en un conocido hotel de Manzanares, José Luis López, en nombre del Gobierno de Castilla-La Mancha, agradeció a este tipo de asociaciones su trabajo "porque sois fundamentales dentro del entramado sociosanitario y sin vosotras sería más difícil", dijo, por lo que mostró una vez más la colaboración de la Consejería de Sanidad.

Los socios de ARMAN también tuvieron una sorpresa con su presidente y fundador, Pepe López, y con su esposa Ana, a quienes homenajearon por su labor en la asociación. López Domínguez, que tuvo palabras de recuerdo para quienes abandonaron, dijo que cada uno ha tratado de buscar lo mejor en cada momento y de ser más libres. Por último abogó por ser humildes y perseverantes.

La cena concluyó con un baile hasta altas horas de la noche y que puso el colofón a una intensa jornada de trabajo que comenzó bien temprano con la participación a las siete y media de la mañana en el Rosario de la Aurora. Como muestra de agradecimiento a las monjas de clausura, que les ceden las instalaciones de su sede, distintos miembros de ARMAN portaron en andas la imagen de la Virgen de Fátima durante el tradicional Rosario. Éste recorrió las calles Villarreal, San Francisco de Asís, Molinos de Viento, Padres Capuchinos, Virgen de Gracia y Blas Tello, concluyendo en el Convento con vivas a la Virgen. A continuación, los socios de ARMAN y colaboradores disfrutaron de un desayuno para reponer fuerzas.