Una tuneladora abre paso al nuevo colector bajo la línea de ferrocarril
Una tuneladora abre paso al nuevo colector bajo la línea de ferrocarril
Las obras de instalación del nuevo colector de aguas residuales desde la Avenida de Cristóbal Colón hasta la depuradora continúan a buen ritmo y cumpliendo los plazos previstos. Al tiempo que se instala la tubería ovoide en la calle paralela a los Paseos del Río, una tuneladora abre paso al colector bajo las vías del tren.
Al principio del verano fue una espectacular máquina zanjadora de 140 toneladas de peso la que utilizó la empresa Sedesa para abrir una profunda canalización para la instalación del nuevo colector de aguas residuales. Ahora dispone de una no menos llamativa tuneladora para que el colector pase por debajo de la línea de ferrocarril Madrid-Cádiz, en las inmediaciones del conocido “banco de la paciencia”.
Mientras que la máquina va abriendo el túnel, inserta la tubería, de 1,20 metros de diámetro. La obra avanza en este punto a razón de dos metros lineales al día, y debe franquear un total de treinta metros. Para instalar la tuneladora ha sido preciso abrir una gran calicata sobre la que se ha instalado un puente grúa. En la pared de fondo se ha hecho un muro de ataque desde el que la tuneladora empuja de forma hidráulica, según explicó Mónica Célix, jefa de obra de Sedesa en Manzanares.
La obra de instalación del colector, cuyo presupuesto ronda los dos millones de euros, ya está prácticamente terminada desde la depuradora hasta la línea de ferrocarril. También ha seguido al otro lado de las vías por la explanada de los Paseos del Río y a lo largo de la Avenida de Cristóbal Colón, por donde se abre la zanja estos días. Aquí la profundidad es menor que en otros tramos y se utiliza maquinaria menos llamativa. No obstante, la dureza del terreno obliga a emplear un martillo percutor para hacer la excavación.
La segunda fase del colector, de casi dos kilómetros de longitud, enlazará a la altura de la fábrica de harinas con el punto en el que concluyó la primera, procedente del bulevar de la Avenida de Castilla-La Mancha y por donde se recogerán también las aguas residuales de la vecina localidad de Membrilla así como las otras zonas de crecimiento urbanístico de Manzanares.
Esta importante obra está financiada en su mayor parte con presupuesto propio del Ayuntamiento de Manzanares, que sufraga la totalidad del tramo de colector que discurre desde la depuradora hasta el ferrocarril y la mitad del que va desde el ferrocarril hasta la fábrica de harinas. En el resto del presupuesto colaboran el Gobierno Regional y la Diputación Provincial.