“Ser cofrade es una forma de llegar a Dios”, según la exaltadora Antonia Espinosa

Con una pequeña representación teatral sobre “el sentimiento cofrade” con textos y la voz de Martín Díaz Madroñero, pregonero de la Semana Santa 2007, dio comenzó la VII Exaltación Cofrade de la Hermandad del Santo Entierro y Virgen de la Soledad. El secretario de la cofradía, Manuel Martín de Bernardo, fue el encargado de presentar el acto celebrado el domingo en la Casa de Cultura con la presencia de numeroso público.

A continuación, la exaltadora 2007, María Garrido, realizó un perfil biográfico de la actual pregonera. Resaltó de Antonia Espinosa que sus creencias las ha vivido desde el latido de su corazón, “esforzándose en la vida para conseguir todo lo que es y practicando con orden sus actividades y acciones”. Dijo que la religión es un punto de referencia en su vida y su familia ha sido “el nexo de unión” para llevarla a la práctica. Además destacó su cercanía, humanidad, sencillez y amor a su tierra, ahora en la distancia.

Por su parte, Antonia Espinosa, agradeció las palabras de “elogio” de su antecesora en el cargo. En su discurso puso de manifiesto distintos aspectos de cómo vivir la Semana Santa desde la fe. Para la Exaltadora 2008 de la Hermandad del Santo Entierro y Virgen de la Soledad ésta representa un aspecto fundamental de la religión cristiana ya que se celebra en el templo y se vive en el corazón de muchas personas. “Nosotros los cofrades necesitamos realizar una manifestación externa de nuestras creencias y lo hacemos sacando las imágenes a la calle”.

Alabó la labor de las hermandades así como el sentimiento cofrade que viven muchos hombres y mujeres como (músicos, costaleros, penitentes, entre otros) para dar esplendor a la Semana Santa. Igualmente enfatizó que “ser cofrade es otra forma de llegar a Dios que a lo mejor no es tan religioso como tendría que ser, pero es una muestra de amor y no se aleja tanto de la Iglesia como algunos creen”, señaló.

En su exaltación Espinosa quiso destacar el papel fundamental que las mujeres han realizado en las hermandades a lo largo de la historia. Puso de manifiesto, que al igual que otros campos “la paridad se está haciendo latente en las cofradías”. Cabe destacar que la exaltadora ha sido secretaria y vicepresidenta de su hermandad así como componente de la junta de cofradías de Manzanares.

A continuación su discurso se lleno de vivencias y emotivos recuerdos vividos en sus 24 años de pertenencia a la hermandad manzanareña y en ella se fomentan los valores humanos. Añadió que las cofradías son un ejemplo de tolerancia y como sus componentes se convierten en hermanos “a pesar de no tener la misma sangre, pero sí les une el vínculo de la sangre de Cristo”, señaló.

Citó nombres de muchos de las personas que en estos momentos llevan adelante la hermandad del Santo Entierro y Virgen de la Soledad y recordó otros muchos que ya han desaparecido, pero su trabajo y labor siempre estarán presentes en la cofradía manzanareña.

Para Antonia Espinosa ser exaltadora de su cofradía ha sido “un honor” y los dos hombres de su vida: su hijo y su marido, fueron quienes le animaron a realizar este discurso cargado de sentimientos y realizado desde lo más profundo de su corazón. “Los que me conocen saben lo que he amado a mi Cristo y a mi Virgen”.

Por otro lado, durante la VII Exaltación Cofrade se realizó un reconocimiento a Vicente López Callejas así como al matrimonio formado por Ángela Márquez y Antonio Romero , hermanos de la cofradía, por el trabajo realizado. Además, se homenajeó a las empresas locales ITV y ALM. El acto concluyó con un concierto ofrecido por la Banda de Cornetas y Tambores del “Santísimo Cristo Resucitado”, de Manzanares.