El SEPES licita el estudio geotécnico de la ampliación del Polígono Industrial
El SEPES licita el estudio geotécnico de la ampliación del Polígono Industrial
El Ministerio de la Vivienda anuncia la licitación de la redacción del estudio geotécnico de la ampliación del Polígono Industrial de Manzanares, denominada técnicamente “Manzanares Ampliación”. La resolución del SEPES, Entidad Pública Empresarial del Suelo, ya está en el BOE. Se trata de un procedimiento abierto, con subasta como forma de adjudicación.
La redacción del estudio geotécnico de “Manzanares Ampliación” cuenta con un plazo de ejecución de 90 días naturales a partir de la firma del contrato. Se utiliza una tramitación ordinaria, por procedimiento abierto y en forma de subasta. El presupuesto base de la licitación es de 116.209 euros y la garantía provisional de 2.324 euros.
Al contratista se le exige solvencia económica y financiera, además de solvencia técnica y profesional. La fecha límite de la presentación del estudio en el Registro de SEPES será el 11 de abril. La apertura de las ofertas tendrá lugar el 7 de mayo.
La licitación publicada en el Boletín Oficial del Estado es fruto del convenio suscrito en junio de 2005 entre la Ministra de la Vivienda, María Antonia Trujillo, y el alcalde de Manzanares, Miguel Ángel Pozas, y que permitirá ampliar el Polígono Industrial manzanareño en 129 hectáreas, 19 de las cuales se destinarán a suelo residencial.
Fruto del acuerdo alcanzado con el Ayuntamiento, el Gobierno de España invertirá en esta ampliación del Polígono de Manzanares 33 millones de euros que permitirán el acceso a una vivienda a 760 familias y la ubicación de unas 250 nuevas empresas que se estima podrían crear dos mil empleos.
La ampliación del Polígono Industrial se hará en 110 hectáreas situadas en el terreno delimitado al Norte por la nueva autovía A-43, al Oeste por la A-4, al sur por la tercera fase de actual polígono Industrial y al Este por la carretera de Alcázar de San Juan. Justo al otro margen de esta carretera, entre ésta y la línea férrea, a continuación de las instalaciones de Tudor, están las 19 hectáreas que se destinarán a suelo residencial para construir viviendas con régimen de protección.