La salvaguarda de la Venta de Borondo, en una exposición
Hasta el 28 de febrero
La salvaguarda de la Venta de Borondo, en una exposición
La biblioteca municipal ‘Lope de Vega’ presenta 22 miradas artísticas sobre este monumento cervantino del siglo XVI
Pocos edificios como la Venta de Borondo representan mejor lo que era una venta manchega en la época de Cervantes. Con muchas dificultades, este monumento del siglo XVI sigue en pie y ha llegado hasta nuestros días gracias, entre otros, al empeño de la asociación cultural que lleva su nombre y que hasta fin de mes presenta en la biblioteca municipal de Manzanares una exposición con 22 miradas artísticas sobre este edificio.
A poco más de 20 kilómetros de Manzanares (a 6 del paraje de Siles) encontramos la Venta de Borondo. Esta venta manchega se levantó en el siglo XVI en lo que entonces era un importante cruce de caminos. Aunque pertenece al término municipal de Daimiel, se ubica en el límite de los términos de este municipio con Almagro, Bolaños y Manzanares, por lo que se trata de una edificación que despierta gran interés en esta comarca por su valor etnográfico e histórico.
“Es un elemento etnográfico, arquitectónico e histórico muy importante de la comarca y esta exposición denuncia cómo algunos elementos interesantes e importantes quizá no han tenido el apoyo o el cuidado que se merecían. Espero que esa situación cambie”.
Así lo destacó el pasado sábado la concejala de Patrimonio Artístico del Ayuntamiento de Manzanares, Isabel Díaz-Benito, en la inauguración de la exposición titulada ‘Una mirada artística a la Venta de Borondo’ que se puede visitar hasta el 28 de febrero en la biblioteca municipal ‘Lope de Vega’. En ella encontramos 22 miradas en forma de fotografías, dibujos o pinturas que presentan vistas, rincones o elementos de este edificio que nos hacen viajar varios siglos en el tiempo y que reflejan cómo se está salvaguardando de la ruina.
Según David Cejudo, presidente Asociación Cultural Venta de Borondo y Patrimonio Manchego, esta muestra presenta “la mirada de toda la gente que ha ido a hacer una visita”. La asociación, promotora de esta exposición itinerante que ya se pudo ver en Daimiel, se constituyó en 2016 con el objetivo de salvar esta venta manchega que, desde 2007, está declarada Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de monumento, según explicó su presidente.
Todo el trabajo de concienciación, como el que se hace con esta exposición, está dando sus frutos. En el año 2022, sus propietarios donaron la Venta de Borondo al Ayuntamiento de Daimiel que, actualmente, con una inversión de 200.000 euros en la que colabora la Diputación Provincial, está interviniendo en la cubierta y fachadas del edificio, aunque aún queda mucho por hacer en su interior y anexos. El objetivo es recuperarla y que pueda visitarse.
“Ojalá sigan llegando más apoyos y podamos verla convertida en un museo o en un centro de interpretación, en lo que el Ayuntamiento de Daimiel estime conveniente”, explicó David Cejudo, que espera que para el otoño que viene ya se puedan organizar visitas.
Además de Isabel Díaz-Benito, a la inauguración asistieron la concejala de Bibliotecas, Paqui de la Cruz, y representantes de asociaciones locales, como El Zaque.