El presidente de la CHG presentó en FERCAM el borrador del Plan Especial de Alto Guadiana
El presidente de la CHG presentó en FERCAM el borrador del Plan Especial de Alto Guadiana
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana presentó en la Feria Regional del Campo de Manzanares el borrador del Plan Especial del Alto Guadiana, en una jornada informativa organizada por COAG-IR. Enrique Calleja dijo que su intención es acabar con la situación de inseguridad que se vive actualmente en el campo y apoyar a los agricultores para que puedan vivir de su trabajo.
El presidente afirmó en el coloquio posterior a su exposición, a preguntas de un agricultor sobre la situación delicada en que se encuentran quienes tienen pozos ilegales, que su deber es velar por el cumplimiento de la legalidad, pero que para él lo más importante es que se salga de la situación de inseguridad y que los hombres del campo puedan vivir tranquilamente de su actividad, y que, a quienes no pueden hacerlo, también se les diga.
Señaló también que se está intentado resolver la problemática de los pozos ilegales a base de “ponderar” las varias situaciones existentes animando a los agricultores que se encuentren en dificultades a presentar un recurso de reposición dirigido a él en el que narren con sencillez la situación personal y económica de cada cual, para lo que no precisan de ningún abogado. Se comprometió a verlas y dales respuesta.
Los principales objetivos del PEAG, señaló Calleja, son la consecución del buen estado cuantitativo y cualitativo de las aguas subterráneas y el buen estado de las superficiales, recuperando la conexión entre unas y otras, además de corregir el déficit hídrico estructural existente.
Como paso previo a la exposición del borrador del Plan Especial del Alto Guadiana, dijo que no va contra nadie sino a favor de todos, y que tiene como finalidades apoyar una agricultura económicamente viable y el respeto al medio ambiente. Abogó por el consenso como método para sacarlo adelante y se fijó como fecha probable eneros del próximo año si se trabaja con eficacia.
Señaló que el Plan Hidrológico del Guadiana reconoce un balance global negativo entre los recursos renovables y las demandas requeridas en la zona, y por tanto una situación de sobreexplotación. Para intentar resolverla, dijo, a lo largo de los últimos quince años se ha intentado varias soluciones que no dieron el fruto deseado.
Se refirió a la Ley del Plan Hidrológico Nacional y a los pasos que se han dado en la elaboración del PEAG, desde la primera versión en febrero de 2004 hasta las jornadas de discusión pública que se desarrollaron en octubre de 2005. Con la Directiva Marco de Aguas del Parlamente europeo como paisaje de fondo, señaló que el Plan del Alto Guadiana debe ser un instrumento que contribuya a alcanzar los objetivos que marca y que deberá integrarse en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Guadiana.
Entre los documentos que deben constituir el Plan analizó la memoria técnica, el estudio económico y un convenio a establecer entre la Administración General del Estado y la Comunidad Autónoma, haciendo especial referencia a los programas hidrológico, ambiental y agrícola.
Sobre los principios y contenido del Plan dijo que la dotación económica procederá de los Presupuestos Generales del Estado, de los de la Comunidad Autónoma y de los Fondos Europeos procedentes de las políticas medioambientales y agrícolas. Subrayó especialmente las sustituciones de captaciones individuales por colectivas con la colaboración de las comunidades de usuarios para su planeamiento, desarrollo y posterior gestión, sin aumentar ni disminuir la disponibilidad de agua para los usuarios.
La reordenación de los derechos ocupó la última parte de la exposición del presidente de la Confederación quien señaló que la transformación de derechos privados tiene las ventajas de tender a la superación de la sobreexplotación y dar la posibilidad de participar en los procesos de intercambio de derechos o contratos de cesión.
Para acelerar el proceso de recuperación de niveles de los acuíferos y de su buen estado, el Plan plantea la adquisición de terrenos y derechos de agua inscritos en el catálogo o registro de las masas de agua en riesgo.