El PP no considera que tenga que pedir perdón por el tema de la finca “Casa del Conde”

El concejal del Partido Popular Teodoro Rincón Calero manifestó ante los medios de comunicación locales que su grupo no admite la moción presentada en el último Pleno por el equipo de gobierno en la que se exigía a la oposición que pidiera perdón por el tema de las aguas de la finca “Casa del Conde” y añadió que es el Grupo socialista quien debe hacerlo por realizar falsas acusaciones sobre concejales elegidos democráticamente por el pueblo de Manzanares.

Rincón explicó que su grupo apoyó la moción que presentó en su momento IU para denunciar los hechos que provocaron la muerte de peces; pedir que la concejalía de Medio Ambiente realizara una investigación; y para que el Ayuntamiento se personara como parte afectada. En este sentido, el concejal del Grupo Popular manifestó que nunca se habló de una relación causa-efecto entre el agua del río Azuer y las balsas de la finca.

Basándose en el informe realizado por el Seprona, Rincón dijo que las conclusiones indican la existencia de un problema en las aguas de la balsa y su origen, añadiendo que, después de haber leído los distintos informes, “no está del todo claro y, mucho menos, permite descartar posibilidades, ni exigir responsabilidades, ni realizar reprobaciones a quien denuncia los hechos y a quien pide que se investiguen”.

Por su parte, Juan Rodríguez Rubio acusó al equipo de gobierno de ser incapaz de tomar medidas preventivas para evitar los efectos del “frenazo” que se está produciendo en el sector de la construcción, al rechazar la moción del PP en la que se proponía la reducción del ICIO del 4% actual al 2%. El concejal Popular explicó que con la propuesta se pretende que en Manzanares se mantenga el mismo nivel de actividad que existe hasta la fecha en el sector de la construcción y evitar el incremento del desempleo.

En opinión de los representantes municipales del PP, “la no adopción de la medida por parte del equipo de gobierno supone olvidarse de los empresarios que generan empleo, y de los pequeños ahorradores que con su trabajo y esfuerzo aspiran a construirse un hogar mejor”.

Rodríguez añadió que “da la impresión de que poner trabas a la inversión y al ahorro forma parte de una fina y sutil estrategia encaminada a obstaculizar la inversión privada, frenando así la creación de empleo y consiguiendo que otros vecinos más humildes caigan en una especie de telaraña presentada en forma de oportunos y salvadores planes de empleo”.