Un paseo geológico descubre el tipo de piedra y roca utilizadas en el pavimento y edificios de Manzanares
Un paseo geológico descubre el tipo de piedra y roca utilizadas en el pavimento y edificios de Manzanares
El paseo geológico que organizó el Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Manzanares, guiado por el biólogo José Luis Olmo, sirvió para reconocer los tipos de roca y piedra que conforman el pavimento de la localidad. La veintena de personas que participó en la actividad también descubrió algunas curiosidades sobre edificios tan emblemáticos como la Parroquia cuyos sillares, construidos con arenisca, se utilizaban para afilar navajas.
Las II Jornadas de Medio Ambiente, organizadas por el Área delegada del Ayuntamiento de Manzanares y el Foro Ciudadano de la Agenda 21 Local, incluyeron un Paseo Geológico con el objetivo de dar a conocer cómo las rocas, principalmente las ornamentales, se han empleado de forma muy diversa y están muy presentes en las fachadas de algunos edificios, iglesias, calles y plazas de la localidad. El trayecto se realizó desde la calle Cárcel hasta la Plaza del Gran Teatro, pasando por la Plaza de la Constitución, Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, y calles Empedrada y Toledo.
La actividad, dirigida por el biólogo manzanareño José Luis Olmo Rísquez, comenzó con una clase teórica en la Biblioteca Municipal “Lope de Vega” que sirvió para poner en antecedentes a los participantes sobre el concepto, origen, composición, características, propiedades, utilización y tipos de rocas que existen y su clasificación en sedimentarias, magmáticas y metamórficas. Para ello, ilustró su exposición oral con una proyección de imágenes y algunos experimentos prácticos.
El recorrido comenzó observando la fachada de la Biblioteca Municipal “Lope de Vega” cuya roca es una caliza fosilífera donde se aprecian cientos de conchas incrustadas. De la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción destacó sus sillares construidos con arenisca de color rojizo, debido a su composición de hierro, y que en otros tiempos se utilizaba para afilar navajas, tal y como queda reflejado en las marcas que se aprecian en ellas.
En el pavimento de la calle Cárcel se aprecia su adoquinado con basaltos, piedras casi negras de rocas magmáticas volcánicas que se han formado por el enfriamiento de un magma en el exterior de La Tierra, o lo que es lo mismo, coladas de lava solidificada. Este tipo de adoquines, que se extraen de las canteras existentes en el Campo de Calatrava, también se encuentra en las calles Monjas, Jesús del Perdón, Virgen del Carmen o Doctor Fleming, entre otras.
A lo largo del Paseo Geológico los participantes pudieron observar y reconocer otras rocas como el mármol en el suelo de la Bilioteca, el travertino en las losas de la Plaza de la Constitución, la cuarcita en los cantos rodados del empedrado existente en el exterior de la Parroquia y que también se encuentra en la Plaza de San Francisco de Asís, el granito en el embaldosado de la calle Empedrada.
Así mismo, a su paso por la calle Toledo, conocieron que el petróleo es la única roca líquida y, aunque algunos autores no la consideran como tal, pertenece al grupo de las organógenas ya que están formadas por restos de seres vivos muy transformados y que se utiliza para el asfaltado de las calles.
En el embaldosado de la Plaza del Gran Teatro vieron las pizarras, rocas metamórficas originadas por la transformación de las arcillas sometidas a alta presión y temperatura. Ésta es muy empleada como ornamental, y en Manzanares ya existen varios edificios cuyas fachadas son de pizarra, aunque la roca más empleada actualmente como ornamental es la caliza travertino, conocida como piedra de Valdepeñas.
Para la veintena de personas que participó en la propuesta, desafiando el intenso calor del mediodía del sábado, el Paseo Geológico resultó muy atractivo, interesante y pedagógico. No en vano, el trabajo realizado por Olmo Rísquez está enfocado a la educación pudiéndose ampliar a otros ámbitos y para toda la ciudadanía.