La OMIC ofrece recomendaciones para que la pérdida de maletas en los aeropuertos no altere las vacaciones

El técnico municipal de consumo, Javier Márquez, informa que la facturación del equipaje debe hacerse en el mostrador asignado a la compañía aérea al efecto, donde se entregará a cada pasajero la tarjeta de embarque y el talón del equipaje. En el tráfico internacional el sistema empleado es el mismo que en los vuelos nacionales, excepto con las rutas con destino Estados Unidos y Canadá y otros países consiste en limitar el número de bultos transportados y que éstos tengan un volumen determinado.

La OMIC de Manzanares recomienda que no se incluya en el equipaje facturado artículos perecederos, frágiles, objetos de valor ya que las compañías no suelen aceptar responsabilidad alguna respecto al contenido de las maletas.

En cuanto al equipaje de mano, la OMIC sugiere que se consulte con la compañía aérea antes de emprender su viaje y debe tener en cuenta los artículos que están prohibidos. Así, solo está permitido llevar pequeñas cantidades de líquidos en contenedores con una capacidad individual máxima de 100ml. Estos deben empaquetarse en una bolsa transparente de plástico con auto cierre de no más de un litro de capacidad máxima. Se consideran líquidos agua y otras bebidas, sopas, jarabes, perfumes, geles o pasta de dientes, etc.

El técnico de consumo dijo que cuando existan incidencias en el equipaje (daños, retrasos y pérdida) se establece un límite máximo en la responsabilidad de 1.000 Derechos Especiales de Giro (DEG) por pasajero, salvo declaración especial de valor. El pasajero deberá acogerse a un límite de responsabilidad más elevado efectuando una declaración especial de valor de su equipaje, a más tardar en el momento de facturar, y abonando una tarifa suplementaria.

Añade que únicamente se podrá realizar si se presenta en facturación con el tiempo de antelación suficiente para proceder a las correspondientes comprobaciones y evaluaciones por parte del personal de la compañía aérea.

En cuanto a la referencia de los 21 días, desde la OMIC se informa que es el período de retraso a partir del cual la compañía debe tratar el equipaje como perdido y no como retrasado. Algunas aerolíneas ofrecen compensaciones para cubrir sus gastos de primera necesidad. Otras, en cambio, pagan una cantidad por día hasta un máximo de días. “Si su maleta no le ha sido devuelta pasados 21 días después de su vuelo, la compañía deberá tratar su reclamación como una pérdida de equipaje”.

En el equipaje perdido tras 21 días después que sucedió la incidencia, es probable que la compañía solicite una lista de su contenido así como facturas originales de determinados objetos. En el caso de reclamaciones por equipaje dañado, muchas aerolíneas hacen un pago ajustado al valor de la maleta o al objeto de su interior que ha resultado dañado. Otras compañías directamente le ofrecen una maleta nueva similar a la dañada o le remiten a una tienda concertada con la compañía para adquirirla allí.

Javier Márquez apunta que la falta en el equipaje es difícil de demostrar ya que normalmente no puede acreditarse que dichos objetos estaban en su interior cuando facturó, por lo que probablemente no obtenga compensación alguna de la compañía.

Por este motivo se recomienda utilizar maletas con cierres de seguridad, tratando de no facturar efectos personales de alto valor y contratar seguros de viaje que cubran estas incidencias. Si comprueba que algún objeto de su equipaje ha sido sustraído, debe interponer lo antes posible una denuncia en la comisaría de policía.