El Manzanares FS tumba al líder Oxipharma
El Manzanares FS tumba al líder Oxipharma
El Manzanares F.S venció al Oxipharma de Granada por cuatro goles a tres, en un partido trepidante y muy disputado, dos equipos fueron en busca de la victoria con distintos argumentos sobre la pista y ganó quien estuvo más acertado y fue más listo. Nuevamente la afición de Manzanares fue determinante en el triunfo local ante el más firme candidato al ascenso a la máxima categoría del fútbol sala español.
Nuevamente la afición fue determinante en el triunfo local ante el más firme candidato al ascenso
Qué pase el siguiente. Esa era la expresión más empleada por los aficionados manzanareños al término del encuentro. Comenzó el partido con un Oxipharma dispuesto a romper la imbatibilidad local en el Villatoro, presionaba en primera línea con contundencia y hacía que Manzanares no llegara con claridad a las inmediaciones de Edu. No obstante fueron los azulones los que con un disparo de Kiki al palo dieron el primer susto. Manzanares sufría y nuevamente Pepote supo mantener a su equipo en el partido. Fruto de la presión visitante, los locales pierden un balón en las inmediaciones del área y un equipo como Oxipharma no perdona. Sergio definió perfectamente ante Pepote estableciendo el cero a uno con el que se llegaría al descanso.
Antes de ese descanso, y ante el buen partido que se estaba presenciando, los árbitros pusieron la nota negativa convirtiéndose en los protagonistas con decisiones muy discutidas por ambos bandos, especialmente por los locales a los que no señalaron un claro penalti y cargaron de faltas, con el consiguiente condicionante que suponía a la hora de defender.
En la segunda mitad comenzó el Manzanares mucho más incisivo, con menos respeto ante el rival y con el convencimiento de que podían hacerlo. Merced a ese convencimiento y a un apoyo incondicional del público en los momentos que más lo necesitaba, Zamo, con dos goles, volteaba el marcador y abría un nuevo partido. Poco duró la alegría a la parroquia ciudadrealeña puesto que al saque de una falta, Juan Puertas establecía el empate nuevamente. Seguía el duelo táctico, duelo de pizarras que se decantaba para los locales con un tanto de Kikillo que obligo a Granada a jugar de cinco.
Los últimos minutos fueron de infarto, Carlos Alberto hizo la igualada a tres para el final, pero los manchegos estaban dispuestos a escribir una nueva pagina histórica y lejos de conformarse buscaron con ahínco el tanto que les diera la victoria. Pepote, con una parada inconmensurable, y Juanillo, con un gol a treinta segundos para el final, consiguieron rubricar el triunfo de equipo y de aficion. Que este sueño que esta viviendo la ciudad dure mucho tiempo.