Impresionantes decorados y grandes cantantes en "Tosca"

Impresionantes decorados y grandes cantantes en "Tosca"

El Gran Teatro vivió el sábado una extraordinaria noche de ópera con la representación de "Tosca", una de las obras más emblemáticas de Giacomo Puccini que llegó a Manzanares gracias a Caja Castilla-La Mancha y al Área de Cultura del Ayuntamiento. El público, que llenó el patio de butacas, disfrutó de artistas que habitualmente actúan en las principales óperas del mundo.

Cultura. Espectáculos
25-10-2005

Manzanares volvió a degustar una gran ópera. "Tosca" demostró en el Gran Teatro que es una de las grandes obras del género. La compañía Ópera 2001 presentó un impresionante elenco de músicos y artistas que lucieron vistosos vestuarios ante imponentes decorados. El escenario se convirtió en la iglesia de Sant'Andrea della Valle en el primer acto, en el Palacio Farnese en el segundo y en la terraza del Castillo de Sant'Angelo en el espectacular y trágico acto final.

Luis Miguel Lainz, productor de la compañía, resaltó las condiciones del teatro manzanareño para albergar este montaje, "una historia maravillosa que permitirá adentrar en este mundo a quien no haya ido nunca a la ópera", explicó. Dijo que es una de las óperas más populares de uno de los autores más populares, Puccini, calificando a "Tosca" como una de las grandes composiciones operísticas.

Un montaje de estas características moviliza a ciento veinte personas entre músicos, cantantes y personal técnico. La música en directo desde el foso del teatro corrió a cargo de la Orquesta Filarmónica de Pleven, con cuarenta y cinco componentes, dirigida por el norteamericano Chris Nance.

Cantantes y coro llegaban a poner el pelo de punta por su buen hacer y por las excelentes condiciones acústicas del Gran Teatro. Como protagonistas actuaron la soprano Gabriella Gelgeva, de la Ópera de Sofia (Bulgaria), en el papel de "Tosca"; como "Cavaradossi" el tenor italiano Orfeo Zanetti, habitual en los principales teatros europeos; y como el malvado "Scarpia" el gran barítono Boaz Senator, a su vez director artístico del espectáculo.

Después de más de dos horas y media de actuación, con sobretítulos en castellano del libreto de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, los protagonistas recibieron un caluroso aplauso prolongado durante varios minutos.

El público disfrutó así en Manzanares de un montaje de primer nivel mundial que difícilmente podría verse fuera de grandes ciudades de no ser por las grandes condiciones de los auditorios de la Red de Teatros de la región y por el esfuerzo de Caja Castilla-La Mancha y de los Ayuntamientos que se han sumado a esta gira de diez representaciones que culminará el 31 de octubre en Tomelloso. Y es que democratizar la ópera y conseguir que ésta no se quede únicamente en los principales teatros del planeta para públicos muy selectos es uno de los objetivos de la compañía Ópera 2001 desde su fundación en París hace más de veinte años, según declaró Lainz.