Finaliza con éxito un curso de cocina para inmigrantes de carácter formativo-laboral

Finaliza con éxito un curso de cocina para inmigrantes de carácter formativo-laboral

El Ayuntamiento de Manzanares clausuró un curso formativo de cocina para inmigrantes al que han asistido un total de dieciséis mujeres de diferentes nacionalidades. Con esta iniciativa la concejalía de Servicios Sociales pretende que las participantes aprendan a elaborar platos típicos de la gastronomía española con el fin de facilitarles su inserción socio-laboral en el gremio de la hostelería y otros sectores relacionados.

Actualidad Municipal
30-06-2007

El curso de cocina y restauración dirigido a personas extranjeras residentes en Manzanares, puesto en marcha por el Servicio de Atención y Mediación al inmigrante (SAMI), dependiente de la concejalía de Servicios Sociales y desarrollado en las dependencias de UGT, fue clausurado el jueves por Julián Nieva, concejal responsable del Área municipal. Las dieciséis alumnas recibieron los correspondientes diplomas de participación en la actividad y realizaron para la ocasión una muestra de los platos más representativos de la gastronomía de sus países de origen.

El principal objetivo del curso es el de facilitar la integración de la población inmigrante en la sociedad manzanareña mediante la formación en aquellas áreas en las que los extranjeros desempeñan habitualmente su actividad laboral. En este sentido, Nieva destacó la importancia de promover este tipo de cursos formativos ya que la mayoría de los extranjeros que residen en Manzanares desarrolla su actividad laboral en sectores relacionados con la cocina como son la hostelería, residencias de ancianos o servicio doméstico, entre otros.

En este curso han participado un total de dieciséis mujeres, en su mayoría, procedentes de países del Este de Europa como Rumanía, Bulgaria o Rusia, aunque también han asistido inmigrantes de países latinoamericanos y del Norte de África. Para las alumnas, su asistencia al curso de cocina les ha permitido aprender a elaborar platos típicos de la gastronomía española en general, y de la castellano-manchega, en particular, algo que les servirá de gran utilidad para su inserción laboral.

Por su parte, Pepa Fernández-Arroyo García, monitora del curso de cocina, destacó el carácter de formación socio-laboral del curso por lo que los contenidos se basaron principalmente en la realización de comidas dirigidas a sectores en los que pueden tener posibilidades de empleo. La monitora también valoró la alta participación, el interés, la constancia de las alumnas y, sobre todo, el ambiente de compañerismo y cordialidad que ha existido durante su desarrollo.