Los diabéticos manzanareños pueden acogerse a la prestación gratuita de tratamentos podológicos

El pie diabético es una de las complicaciones más comunes de la enfermedad diebética y constituye uno de los principales motivos de consulta de estos pacientes. Requiere una atención permanente, además de una cuidada higiene por parte de las personas afectadas, ya que según su grado de desarrollo, puede dar lugar a la aparición de graves úlceras y provocar la amputación total o parcial del pie.

Según el podólogo manzanareño, Ricardo Acevedo, la mayoría de las úlceras pueden prevenirse mediante la aplicación de un tratamiento adecuado. Añade que el cuidado podológico y la educación sobre los cuidados del pie para la prevención de las lesiones ha demostrado que puede reducir el número de éstas. Resaltó lo importante que es, para prevenir todo tipo de lesiones, la utilización de un buen calzado.

Consciente de esta problemática, el Gobierno de Castilla-La Mancha fue la primera Comunidad Autónoma en ofrecer atención podológica gratuita a los pacientes diabéticos, sirviendo de referencia para otras regiones.

Esta prestación sanitaria se está desarrollando gracias al convenio de colaboración suscrito entre el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) y el Colegio Oficial de Podólogos de la región. Con el desarrollo de este convenio, el Gobierno regional ha dado un paso muy importante para igualar en servicios a los enfermos crónicos con los que reciben los pacientes agudos.

Ricardo Acevedo aseguró que los pacientes son derivados por el médico de Atención Primaria al podólogo para su tratamiento de quiropodia básica y son atendidos por estos profesionales en un plazo máximo de diez días. Estos tratamientos no suponen ningún coste económico para el paciente, ya que el reembolso de la consulta lo realiza directamente el SESCAM al podólogo.

La quiropodia básica consiste en la eliminación del engrosamiento de la piel y callos; corte y fresado de las uñas, para la prevención del engrosamiento y hongos o micosis; exploración biomecánica, revisión de zonas de apoyo y descarga del pie y estado de hidratación de la piel; y educación del paciente diabético de riesgo para el cuidado personal y vigilancia de sus pies.

A pesar de que los pacientes diabéticos con derecho a esta prestación pueden elegir libremente la consulta a la que quieren ir de entre las recogidas en un listado de centros de podología que le entregan en sus centros de Atención Primaria, son muy pocos los diabéticos de Manzanares los que se han acogido a este programa.

Acevedo aseguró que en solo siete meses, han pasado por su consulta 96 pacientes diabéticos, aunque matiza que en Manzanares existe otra consulta de podología. Añadió que la Organización Mundial de la Salud asegura que un porcentaje de entre el cinco y el siete por ciento de la población puede ser diábetica, aunque muchas personas lo desconocen por lo que podrían censarse en Manzanares entre 4.500 a 5000.

Para ello, existe en la ciudad una asociación de diabéticos, ADIMA, que trabaja durante todo el año en la prevención de esta enfermedad, organizando conferencias y un sin fin de actividades con el objetivo de la detección precoz de esta enfermedad.

Por último, Ricardo Acevedo, señaló que el único profesional sanitario cualificado para diagnosticar y tratar todas y cada una de las dolencias que aparecen en el pie y que puede hacer cirugía ambulatoria, es el podólogo.