Carlos Infante y Cecilio Amores muestran "Matices" en el Gran Teatro

Durante la inauguración de la exposición celebrada este lunes, Cecilio Amores señaló “hay un mundo detrás de cada revelado y sal en todas las miradas” ante el numeroso público asistente. Durante la presentación de “Matices”, el autor de los relatos que matizan cada una de las 89 fotografías expuestas comentó que “elegimos mostraros que hay un mundo escondido en cada sorbo de sol y un misterio escondido en el paladar” para explicar las razones de esta exposición de fotografías con historia.

“Saborear la vida es lo preciso. Contarlo y que lo vierais es nuestro deber y quizá vuestro sueño”, concluyó Amores, que en su intervención tuvo unas palabras de recuerdo para Mercedes Rodríguez, “un amiga y gran mujer” fallecida estos días, a cuya memoria dedicó esta exposición. También agradeció al Ayuntamiento de Manzanares las facilidades prestadas para hacer posible esta muestra.

Por su parte, Carlos Infante quiso agradecer “a toda esa gente que ha conocido por el mundo por esas experiencias vividas” y expresó ese agradecimiento a su familia y amigos pidiendo que se acercaran para darles un abrazo entre los aplausos de los asistentes. El fotógrafo invitó a todos a disfrutar de esta exposición "que está hecha desde el amor y contiene mucha energía positiva”.

El Concejal de Cultura del Ayuntamiento de Manzanares, Manuel Martín-Gaitero, cerró el acto de inauguración, al que también asistió el alcalde de Manzanares, Antonio López de la Manzanara, y varios miembros de la corporación municipal. Martín-Gaitero señaló que “Matices” es una exposición para verla despacio. “Parece que una vez que se dispara la cámara queda la imagen y se desencadena la palabra”, comentó el responsable de Cultura que recomendó dedicarle un tiempo a una exposición que invita a la reflexión.

“Matices” es un proyecto surgido hace ya año y medio entre dos artistas que apenas se conocían. La publicación de una fotografía de Carlos Infante en redes sociales despertó a la musa de Cecilio Amores, que al verla se puso en contacto con él y escribió una breve historia sobre esa imagen tomada en Copenhague de una chica en bicicleta. “Fue un poco mágico y muy bonito”, recuerda Carlos Infante.

Este encuentro fue el comienzo de un trabajo que ha dado como resultado una selección de 89 fotografías, tomadas en diversos lugares del mundo, muchas de ellas en España y Manzanares, para las que Cecilio Amores escribía una historia, un cuento breve a veces sin conexión con la imagen, ya que el contador de la historia no conocía las circunstancias en las que fue tomada esa imagen.

“De alguna manera estamos matizándonos mutuamente”, señala el escritor que explica que, con sus relatos, lo que hace es “matizar la foto desde un punto de vista personal. Carlos matizaba la realidad con sus imágenes y yo matizaba su realidad con mis historias”, explicaba.