Airén y Sotomayor reestrenan “Trazos de una guerra” en el bicentenario de la llegada de las tropas francesas

Airén y Sotomayor reestrenan “Trazos de una guerra” en el bicentenario de la llegada de las tropas francesas

Dos siglos después de la llegada de las tropas francesas a Manzanares, las asociaciones culturales “Airén” y “Sotomayor” reestrenan este domingo en el Gran Teatro el espectáculo musical y literario “Trazos de una guerra”, con el que conmemoran el bicentenario de la Guerra de la Independencia y del histórico episodio vivido en esta ciudad el Viernes Santo, 31 de marzo de 1809.

Cultura
27-03-2009

Con un montaje más elaborado y dinámico que el estrenado en diciembre, “Airén” y “Sotomayor” vuelven a presentar de nuevo ante el público de Manzanares el espectáculo “Trazos de una guerra”, todo un manifiesto contra la guerra a través de la palabra y de la música.

El texto del montaje es una versificación, con lenguaje sencillo pero cuidado, de hechos acaecidos durante la Guerra de la Independencia. Incluye música, con temas tradicionales como romances, jotas y boleros, propios del entorno geográfico y temporal en el que se localizan los hechos y adecuados al contenido del texto. Son cantadas por el Grupo Folk “Airén” con el acompañamiento musical de la Orquesta de Pulso y Púa “Sotomayor”.

Esta es una de las primeras novedades con respecto a su anterior puesta en escena, en la que la orquesta de plectro únicamente participaba en la interpretación de la suite compuesta para la ocasión por Balduino Jesús Rodríguez. Ahora, la orquesta que dirige Martín Cantarero también pondrá música a los temas que cantan los miembros de “Airén”. De esta forma, éstos quedan más liberados y se da más dinamismo al espectáculo, que cuenta con la colaboración de percusionistas de la Banda de Música “Julián Sánchez-Maroto”.

Los colores en los ropajes y la iluminación, los trazos de dibujos que se proyectan del pintor Alfonso Lozano Valle, alusivos a Manzanares, las breves representaciones que ilustran el texto y, por supuesto, la música, contribuyen a la sensibilización del espectador ante el espectáculo. En determinadas escenas, los niños aportan la sencillez y ternura que contrasta con la violencia de la guerra.

La primera parte del montaje se divide en ocho capítulos. El último corresponde al histórico episodio del 31 de marzo de 1809 del encuentro del general francés Sebastiani con la imagen de Jesús del Perdón, como ejemplo de la piedad religiosa de un pueblo y de la contradicción que la guerra engendra en el ser humano.

La segunda parte consta de siete capítulos. En los quince del espectáculo se incluyen temas tradicionales, intercalados con lectura de textos y la suite “Trazos de una guerra”. El valor musical de esta composición fue destacado por el músico Martín Cantarero, quien dijo que se convertirá en una obra de concierto de la Orquesta “Sotomayor”, que además la incluirá en su próximo disco.

María Isabel Ruiz, responsable de la documentación y textos del espectáculo, recordó que Manzanares fue paso obligado de las tropas francesas hacia el Sur, pero también fue capital administrativa de la provincia de La Mancha durante treinta meses, por lo que la influencia de los afrancesados fue notable. Aun bajo estas circunstancias, mantuvieron sus costumbres, sus ritos y tradiciones, su dignidad de ciudadanos ante imposiciones extranjeras. “El valor y la disposición para la lucha les fueron reconocidos en muchas ocasiones y así consta en documentos”, añade.

“Trazos de una guerra”, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Manzanares, tendrá lugar a las 20,00 horas este domingo en el Gran Teatro. Las entradas se pondrán a la venta a las seis de la tarde en taquilla a dos euros.