El Acuerdo Marco del personal funcionario es reflejo de la capacidad de dialogo
El Acuerdo Marco del personal funcionario es reflejo de la capacidad de dialogo
El acuerdo mejora sustancialmente las condiciones de trabajo del personal funcionario, lo que facilitará la conciliación de la vida laboral y social, incorporando y sumando determinadas medidas que conlleva esa mejora social. Así como aportaciones que el ayuntamiento puede hacer para jubilaciones anticipadas, quedando las cuestiones económicas supeditadas a la relación y catalogación de puestos de trabajo, en la que ya están trabajando conjuntamente el Comité de Empresa y La Junta de Personal y se espera que en la negociación de la RPT siga reinando la responsabilidad, el consenso y la sintonía, por todas las partes. El equipo de gobierno continuará manteniendo el diálogo continuo con los representantes de los trabajadores.
Una vez aprobado y rubricado por unanimidad de la representación del Ayuntamiento y por la mayoría absoluta de la representación sindical, se lleva a Pleno para su aprobación el acuerdo marco del personal funcionario del Ayuntamiento de Manzanares para el periodo 2016/2019. Un acuerdo que según dijo la portavoz del equipo de gobierno, Beatriz Labián, es un reflejo de la capacidad de dialogo, de la concreción de propuestas y el espíritu conciliador mostrado por todas las partes. Donde los representantes sindicales además de defender los derechos de los funcionarios a los que representan también han mantenido una actitud razonable, lo que ha permitido firmar este acuerdo en un tiempo relativamente corto, la negociación ha durado apenas dos meses.
Los portavoces de IU, Miguel Ramírez, de UPyD, Jerónimo Romero-Nieva y ACM, Antonia Real están a favor del acuerdo, salvo el portavoz Martín-Gaitero del PP donde el grupo se abstuvo, señalando que aunque se ha mejorado el acuerdo y la negociación ha sido rápida, no ha llegado a conseguirse la unanimidad, mostrando decepción por el Sindicato de Policía que no rubricó el acuerdo marco.
Por su parte Beatriz Labián quiso señalar que era incomprensible la actitud del SPL -Sindicato de Policía Local-, porque estaban de acuerdo con el texto, habiéndolo ratificado permanentemente, con la aceptación del texto hasta último momento y a última hora han querido condicionar la firma del acuerdo, introduciendo variables a lo pactado “no es razonable, ni coherente ni razonable, ya que el acuerdo estaba consensuado con todas las partes” decía la portavoz. Incluso otros compañeros que formaban parte de la Mesa General del Personal Funcionario del Ayuntamiento mostraron públicamente su contrariedad ante este hecho.
Del mismo modo el alcalde, Julián Nieva, explicó que en este sentido todas las posiciones que se tomen son legítimas, aclarando que el acuerdo contaba con la unanimidad de todos los sindicatos, incluido el SPL que en el último minuto decide no firmar, aún aceptando el acuerdo en su totalidad. Nieva dejó claro que después de la decisión de todos y que el acuerdo estaba cerrado, además de que el ayuntamiento hiciera un esfuerzo para cerrar la unanimidad, finalmente y ante sorpresa de todos deciden no rubricar. El primer edil expuso ante la corporación “la verdad absoluta de este tema, y así tienen constancia los representantes sindicales”, que se puede abrir una negociación hasta último momento, pero no una vez que el acuerdo ya esta cerrado, pactado y con el visto bueno por parte de todos, incluido el sindicato que no firmó, afirmando además su representante “acepto el documento pero no lo firmo”.
Ante todo esto Julián Nieva quiso aclarar que el anterior acuerdo, y de ahí viene la polémica, firmado cuando gobernaba el PP, tenía un artículo que el actual equipo de gobierno del PSOE consideraba se tenía que modificar y que trata en concreto que, en Semana Santa, Fiestas Patronales, Cabalgata de Reyes, Carnaval, etc, y según ese artículo firmado por el PP “la Policía podía estar presente o no en estos actos, que era una decisión de voluntariedad” explicó el alcalde. Por esto el equipo de gobierno, aplicando la Ley de fuerzas y seguridad del Estado, interpretando que el servicio público tiene que responder a las necesidades de la ciudadanía “interpretamos que en unas fiestas, en actos de relevancia como Semana Santa y otros de similares características, donde además hay movimiento de ciudadanos, es necesario redoblar el número de efectivos, y eso no puede quedar a la voluntariedad, pues es de lógica que hay que velar por la seguridad ciudadana y reordenar en esos días especiales.